Continúan Denuncias por Irregularidades en Refugio Infantil Santa Esperanza

Carolina Gómez Aguiñaga
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Prensaglobal.com
Puerto Vallarta, Jalisco

Dos ex colaboradores del Refugio Infantil Santa Esperanza aseguran que en esta institución los pequeños albergados reciben malos tratos por parte de los trabajadores e incluso que conocían del presunto acoso del señalado como supuesto violador Luis Cardona hacia la adolescente de 16 años.

De ambas se omitirá el nombre a petición de las entrevistadas. La primera, que trabajo el año pasado en el refugio, declaró que “a todos los niños les daban un medicamento, yo me preguntaba por qué a todos juntos, alguien me dijo que les dan medicamento para controlarlos”.

-¿Como tranquilizantes o calmantes? – “Era para que estuvieran quietos, casi siempre se los daban cuando iban a ir personas del patronato o visitantes o personas importantes… Además, a los que se portaban mal los encerraban en la lavandería porque tiene una reja”.

Comentó que a la hora de la comida, se toca un timbre y si el menor no llega a tiempo, les cierran la puerta y se quedan sin comer, “la comida que donaban se la repartían entre las trabajadores, seguido yo veía que se ponían de acuerdo: las cajas de verduras, las más buenas los trabajadores y hasta los pasteles que les regalaban a los niños, se los llevaban que porque era malo para ellos”.

“A mi seguido me llamaban la atención si abrazaba a los niños o si les demostraba cariño, que no tenía que ser así con ellos, porque se malcriaban… los trataban mal”.

“Las niñeras es pegan a los niños y también las mujeres policías que mandan: hay una niña que tiene retraso mental, ya está grande, tiene como 18 años, pero no sabe lo que hace y la tratan mal, a ella y a los demás niños los agarran con las manos hacia atrás y así les pegan”.

-¿Conociste a esta persona a la que se le acusa de presuntamente haber violado una menor? – “Yo lo conocí, cuando estuve ahí andaba de chofer, él insultaba a los niños y se burlaba de la muchacha enfermita. Las niñas cuando andaban jugando las quería agarrar a nalgadas y eso no está bien, se llevaba pesado con los niños… Las niñas y niños andaban en el baño jugando cuando se bañaban, se supone que los tienen que llevar por grupos y estar la niñera y él se metía a ver… La madre callaba a la niña cuando quería denunciar que él la quería agarrar”.

Otra persona entrevistada sobre este tema, quien estuvo cercana a la menor de edad, manifestó “esta niña todo lo que sucedió es verdad: yo fui a hablar con la madre superiora a decirle lo que estaba pasando y le dije que esto era muy grave porque ella es una menor y la esposa ya tenía conocimiento porque le reclamó a la niña, y ella es la

psicóloga de ellos, no tenía porque decirle nada”. Cabe recordar que la psicóloga del refugio es esposa de la persona acusada.

“No me hicieron caso, me dijeron que tenía prohibido arrimarme a ella (la menor). Yo hablé con ella, las niñas me tuvieron confianza, le dije platícame qué pasa y le aconsejé que no le contestara el teléfono. Ella tiene en su teléfono mensajes que él le mandaba, no se si ella todavía tenga el celular. Además él borró todo lo que le posteaba en la computadora, a mi me consta”.

“No se que haya de transfondo de este asunto, por qué lo quisieron tapar… Son más muchachitas las que están ahí y que bueno que todo esto está saliendo a la luz. Las autoridades se deben llevar a esos niños a otro lado”.