El secuestro de las damas estadunidenses

Esther Rita Weber es una psicóloga escolar de California, de nacionalidad estadounidense originaria de Estados. Hace  tres años denunció haber sido víctima de un secuestro en Nuevo Vallarta y fueron detenidos dos individuos señalados por la agraviada. La señora sostiene que sus plagiarios son de un grupo de delincuentes del crimen organizado. En el expediente consta que en principio con eso la amenazaron aunque al cabo de las investigaciones se concluyó que eso era falso, que no eran miembros del grupo identificado como “lo zetas”.

Fueron dos damas las que en su momento presentaron la denuncia ante autoridades consulares en San Francisco California, averiguación que se turnó al juzgado mixto radicado en Bucerías. La otra víctima es Rosario Flores Solórzano.

A petición de Esther Weber el caso vuelve a la opinión pública. En un escrito difundido entre periodistas la señora esta convocando a una rueda de prensa para hablar del tema Esther Weber “está preparada para hacer unos comentarios a la prensa acerca de su caso, y a pedir públicamente que resuelve el Tribunal Superior de la Justicia del Estado Nayarit, México a éste caso libre de más impedimentos a la justicia…”, se indica en la invitación.

Desde que trascendió a la opinión pública el asunto de las dos damas originarias de California pero avecindadas en Nuevo Vallarta hubo paisajes nada claros. Hubo dos detenidos, Raymundo Arreola García y Salvador Silva del Alto, ambos oriundos de Tacámbaro Michoacán con domicilio en una ranchería del municipio de Ameca. No eran desconocidos para las señoras pues entre las dos partes habían negociado la compra vente de una casona ubicada en Rancho Coronas, Ameca.

Hay un expediente abierto para el caso, el 325/2011 por delito de encubrimiento de secuestro en contra de Salvador Silva del Alto, mismo que se desprendió de la denuncia original, la averiguación previa 241/2009. A este individuo se le aprehendió en septiembre de 2009, fue liberado y en días recientes rehaprendido debido a una apelación interpuesta por la parte ofendida. En contra del juez y secretario del juzgado que dispuso la liberación del acusado, existe una queja administrativa, la 29/201, que acusa actos de corrupción.

En el escrito difundido ayer por Esther Weber hay un adelanto de sus apreciaciones. Se indica que los delincuentes obtuvieron de su secuestro mas de un millón de pesos en bienes y dinero. Dicho plagio se efectuó el 31 de marzo de 2009.

Del mismo escrito se puede rescatar lo siguiente: Después de mucho esfuerzo de su parte (de Esther Weber) para comprobar el caso, dos sospechosos fueron detenidos en Septiembre del 2009. Una semana después de la detención, el mismo juez penal de Bucerías, Nayarit quien ordenó su detención, dejó en libertad a uno de los dos detenidos, Salvador Silva del Alto. Después, se dio cuenta que este juez había liberado a Salvador Silva del Alto a cambio de una pago corrupto fuerte, mediado por sus defensores. Además, al liberarlo, este juez no aseguró la casa que fue producto del secuestro y que estaba a nombre Salvador Silva del Alto, permitiendo su venta a un tercero, así impidiendo su recuperación.

“Aunque el secuestro fue relativamente breve en duración, su lucha para la justicia se ha hecho larga, ardua, y comprometido por la corrupción. De todos modos, ha luchado sin descanso para la reaprehensión del sospechoso, Salvador Silva del Alto, para que respondiera por sus actividades delictivas.

Se acaba de lograr otro paso en la justicia. Hace poco, Esther Weber acompaño a la Policía Investigadora de Guadalajara, para llevar a cabo otra orden de detención en contra de Salvador Silva del Alto. A pesar de toda su influencia y dinero, el nuevo Juez Penal de Bucerías, Nayarit le dictó auto formal prisión.

“Ahora sus abogados han apelado su detención de Salvador Silva al Tribunal Superior de la Justicia en Tepic, Nayarit. En estos días, el Tribunal está tomando la decisión si queda preso Salvador Silva o si lo liberan. El mismo Tribunal también está en proceso de hacer una determinación en su caso de corrupción en contra del juez original en el caso, Juez Ricardo Rodríguez”.

No se sabe a ciencia cierta en que momento ni los medios por los cuales Raymundo Arreola García y Salvador Silva del Alto contactaron a la señoras Rosario Flores Solórzano y Esther Weber. Sin embargo, se considera que son conocidos porque la casa puesta en venta está en Ameca, en donde dijeron residir los dos acusados. El operativo para detenerlos se realizó en aquella zona del estado, en la carretera Tala-Ameca.

La historia original se puede reducir, de acuerdo al proceso judicial 241/2009, a lo siguiente: la denuncia se presentó el 2 de abril de 2009 ante el Cónsul General de México en San Francisco. La seora Rosario Flores manifestó que el 20 de noviembre de 2006 puso en venta una casa en la colonia Rancho Coronas, de Ameca Jalisco. Entre el 25 y 26 de ese mismo mes recibió una llamada de Raymundo Arreola y acordaron las condiciones y fechas para realizar un contrato de compraventa.

Consta en al expediente: “Por lo que el día 28 de noviembre del 2006, Rosario Flores Solórzano y Araceli Hernández González, esposa del Raymundo Arreola, ahora detenido, se presentaron ante el notario público numero 1 de Ameca, Jalisco en donde firmaron contrato de cesión de derechos a titulo oneroso a favor de Araceli Hernández González, quien se comprometió a pagar por la casa la cantidad de $750,000.00 m.n. entregando en ese momento como pago inicial $371,000.00 m.n., comprometiéndose a finiquitar el resto para el día 28 de julio del año 2007, estableciendo en el contrato una penalidad en caso de incumplimiento”.

Pero el segundo pago no se efectuó al cabo de un año y procedía la anulación del contrato. Fue hasta el 31 de marzo de 2009, cuando huno nuevos contactos y las damas aceptaron de buen agrado finiquitar la compraventa pactada. Habló Raymundo Areola, se encontraron en el ingreso a Nuevo Vallarta, las damas lo llevaron a su casa en la calle Jacarandas en donde se liquidaría el adeudo pendiente. Fue en ese momento cuando ocurrió el acto denunciado. Raymundo Arreola tomó un cuchillo, las amenazo y obligó a abrir la caja fuerte, se apodero de un lote de joyas con valor de 120 mil  pesos, 300 dólares americanos. Además, las obligó a que le entregaran dos cheques por las cantidades de 250 mil pesos y el otro de 290 mil pesos. También las exigió le firmaran la cesión de derechos del domicilio ubicado en Ameca, el inmueble causa del conflicto.

El cautiverio se prolongó por varias horas. En ese lapso, escucharon comunicarse a Arreola con Salvador Silva. El primero le informaba que todo había salido bien. Luego les ordenó llevarlo a Puerto Vallarta. Dijeron las damas que en todo momento fueron seguidos por una camioneta tipo pick up conducida por Salvador Silva. En Puerto Vallarta se perdieron de vista. Por miedo viajaron a California y en San Francisco denunciaron todo.

Revolcadero

Pues bien, el diputado local Ramón Guerrero Martínez y los cuatro regidores denunciados por incurrir en actos anticipados de campaña, libraron el problema. El Instituto Electoral y de Participación Ciudadana desechó la denuncia que en septiembre presentó el PRI. El pleno del IEPC consideró que no hubo elementos para sancionar a los acusados. Al salir bien librado “el mochilas” de la acusación hecha por priistas, le ayudará a fortalecer sus aspiraciones a la alcaldía. Al menos ya tiene mejores condiciones para reanudar su proselitismo político y social. ***** En la capital del país ya se comenta que el alcalde de Guadalajara, Aristóteles Sandoval se reunió con el ex presidente Carlos Salinas de Gortari. Les llamó la atención dicho encuentro  porque Sandoval Díaz es visto como un prospecto a ser candidato de PRI al gobierno de Jalisco. Que hablaron de los juegos panamericanos pero sobre todo, la atención se centro en temas políticos, la elección estatal y federal que ya está en puerta.****