Prohibir Uso de Celulares en Escuelas, Abonará a la Salud Mental de Niñas y Niños: LHR

Leticia Arana

Frente al panorama de rezago educativo que aún arrastra amplio sector de la instrucción pública en Jalisco, a raíz desde la pandemia, urge, además de garantizar una alimentación sana, fortalecer un aprendizaje incluyente, focalizado y dirigido a la salud y equilibrio mental de niñas y niños, sostiene, Laura Haro Ramírez, candidata de PRI-PAN PRD, al gobierno estatal, tras enfatizar la necesidad de logre prohibirse el uso de celulares en las escuelas :

“ …Que sean capaces de poder construir su propia historia. Me queda claro que hemos fallado porque efectivamente debemos entrar en una reflexión de que se dejó de hacer. Esta visión indiscutiblemente tiene que tener una atención de lo más serio posible porque si soy convencida de que infancias plenas y bien desarrolladas, es una sociedad, sana. Yo si estoy dispuesta a plantear el prohibir de una vez por todas, el uso de los celulares en las escuelas. Tuve una plática amplísima con expertos en temas de salud mental, y creo que nos ha hecho mucha falta, tomar con seriedad, este gran asunto …”

Explica que esta herramienta que ha revolucionado al mundo y que bien utilizada, favorece la productividad y relaciones a todo nivel, también lamentablemente aísla, despersonaliza y promueve un distanciamiento con la realidad; es un distractor, añade, que puede entorpecer el aprovechamiento académico. Así mismo, insiste en la necesidad de retornar las escuelas de tiempo completo, guarderías, estancias infantiles, los refugios de mujeres violentadas, para favorecer la atención a las infancias y su integridad emocional, ante lo cual, deberá a su vez, reafirmar los presupuesto, impulsar programas de infraestructura educativa, sacar del abandono a los centros escolares, evitar la deserción, o recuperar a los más de 50 mil niñas, niños y adolescentes de esta Entidad, que ya no regresaron a las aulas después de la pandemia.

Por otro lado, lamenta que en varias zonas de la costa sur, prevalezca lo que se ha denominado “niños Klennex,” es decir menores de edad, que han sido reclutados por el crimen organizado, para servir como informantes o halcones, una situación que urge revertir.