Reforma a Ley de Movilidad, Busca Perpetuar Subsidio a Usuarios del Transporte Público, en Jalisco: MMM

Leticia Arana

Para no lastimar aún más, el bolsillo de la mayoría o economía familiar, que arrastra rezagos por la pandemia, y ahora el creciente nivel inflacionario, es indispensable reformar la Ley de Movilidad, con el fin de que el fondo a etiquetarse en el presupuesto estatal anual, propuesto por el gobernador, Enrique Alfaro Ramírez, subsidie permanentemente a usuarios, de enfrentar incrementos a la tarifa de este servicio en Jalisco, afirma la diputada presidenta de la Comisión de Movilidad, Mónica Magaña Mendoza:

“…Se trata de ayudar al estudiante, a que pueda moverse y que no signifique un reto la accesibilidad del transporte público económicamente, para que logre seguir estudiando; a la jefa de familia, para que pueda seguir haciendo sus múltiples ocupaciones, y que la accesibilidad económica al transporte, no sea también un reto, a nuestros adultos mayores, a las personas con discapacidad. Se trata de ayudar a todas las personas que si la tarifa del transporte aumentara, no podría usar sus dos, cuatro, seis, transportes que necesitan para sus ocupaciones, por eso el día de hoy, la bancada naranja, presentamos precisamente la iniciativa para apoyar primero, a las poblaciones prioritarias, jefas de familia, estudiantes, adultos mayores y personas con discapacidad, para que jamás se toque el recurso con el que se les apoya hasta con el 50 por ciento de sus traslados y segundo y muy importante, un apoyo general para todas personas usuarias del transporte público, hablamos de millones de personas que se mueven diariamente en el transporte público y para ellos, es esta iniciativa, con qué objetivo, evitar un golpe a la economía de las familias y personas que necesitan moverse en camión…”

Por su parte, el coordinador de la bancada emecista, Gerardo Quirino Velázquez, sostiene que la actual administración estatal, garantiza conservar tarifa de 9.50 en zona metropolitana y diez pesos en Puerto Vallarta, a pesar de incrementados precios de combustibles, refacciones y otros insumos, necesarios para la operación de dicho servicio, toda vez que se trata de no “cargar” al grueso de usuarios, tales costos, especialmente a aquellos más vulnerables, como es el caso de adultos mayores y personas con discapacidad. Esto, enfatiza, debe ser una realidad, sin que tenga que reducirse la calidad del servicio, como responsabilidad general o compartida. El objetivo principal, finaliza, es garantizar el bien común.