PV, entre los Municipios de Jalisco, con más Casos de Lepra: MSD

Leticia Arana

Aunque la Lepra es una enfermedad perfectamente curable, y figura entre las menos contagiosas, mantiene a Jalisco en los primero cinco lugares por prevalencia, pues en lo que va del año se contabilizan 13 casos, sin embargo, lidera a nivel nacional, ante acciones para su control y erradicación, afirma, Manuel Sandoval Díaz, coordinador Estatal de Programa de Micobacteriosis de la SSJ, tras precisar que Puerto Vallarta, junto con Guadalajara y Tomatlán, son los municipios con más afectados:

“…Como concentración de Municipios, sí, tenemos por ejemplo, están Guadalajara, Tomatlán y Vallarta , que son los municipios que más casos guardan, pero nosotros tenemos prioritarios, aunque sea un solo caso, pero como tienen una población pequeña, esto habla de que como dice la Organización Mundial de la Salud, debemos de tener de menos de un caso por cada diez mil habitantes ….”

Precisa que mantienen vigilancia especial para instrumentación de medidas preventivas en localidades pequeñas, con menos de diez mil habitantes, como Huachinango, Mascota, Ayutla y Tomatlán, toda vez que han presentado más de un caso. La incidencia añade, ocurre particularmente en personas que superan los 50 años de edad , no obstante, han registrado enfermos, menores de 15 años de edad .Aclara que no hay justificación para la discriminación sufrida por quienes la padecen, ya que es errónea la idea de contagios irremediables, como era concebida hace muchos años. Entre los síntomas o manifestaciones por ser padecimiento sistémico que ataca nervios periféricos, sobresalen alteraciones en la piel, pérdida de sensibilidad a lo caliente o frio, debilidad y parálisis muscular, así como caída de vello; afecta principalmente la cara, orejas, cejas, pómulos, manos y pies.

Finalmente asegura que el tratamiento es totalmente gratuito en instituciones públicas del sector salud, entre estas el Instituto Dermatológico de Jalisco, toda vez que prioriza acciones de vigilancia durante cinco años, como seguimiento clínico de casos curados.